El ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes, Juan David Correa, presentó el Plan Nacional de Cultura (PNC) 2024-2038 ‘Cultura para el cuidado de la diversidad de la vida, el territorio y la paz’. Su principal enfoque es biocultural para que la inmensa diversidad cultural y biológica de nuestros territorios sea protagonista en la era del cambio.
“Un verdadero cambio de paradigma no se produce en unos cuantos años. Hemos vivido bajo uno, creado durante doscientos años desde la creación de la república, que ha dejado legados importantes, pero que desconoció sistemáticamente, y con mayor ascendencia en los últimos ochenta años, la segunda palabra de este plan: la diversidad”, afirmó el ministro de las Culturas, Juan David Correa.
De esta manera, el plan busca que las culturas, las artes y los saberes sean prioridades en las agendas públicas, privadas y sectoriales, nacionales y territoriales, para que se reconozca y se impulse su contribución esencial en la transformación social del país.
Marcela Nossa, consejera Nacional de Cultura, expresó que este plan evidencia que hoy hay una mayor concientización de lo que representa la cultura para el país. “La cultura es ese eje fundamental para construir la paz, mejorar la calidad de vida y dignificar al artista”, subrayó.
Cerca de 100 mil ciudadanos, ciudadanas y agentes culturales participaron en la creación del plan. Su desarrollo se plantea a partir de tres campos de trabajo: Diversidad y diálogo intercultural, Memoria y creación cultural y Gobernanza y sostenibilidad cultural.
“’Cultura para el cuidado de la diversidad de la vida, el territorio y la paz’, ese es el nombre del Plan Decenal de Cultura, que ha sido construido desde múltiples miradas, saberes y territorios. Se recoge en un solo documento, pero tiene una mirada plural y múltiple”, subrayó Sergio Restrepo, experto de la fase de revisión del PNC.
Por su parte, Leonidas Valencia, músico y gestor cultural, destacó que el plan insta a la articulación y corresponsabilidad entre el sector privado, público y la sociedad civil en diferentes vías. “Esta iniciativa es importante por ser una apuesta con carácter participativo, que promueve el desarrollo del sector cultural de nuestro país. Está orientado a dar respuesta a los retos de la cultura en el largo plazo y con garantía de derecho”, agregó.
El plan identifica temas estratégicos para el desarrollo del sector en el presente y futuro: cultura libre de exclusiones, igualdad de género, acción climática, memoria, la inteligencia artificial en el contexto de la cultura, discriminaciones y sexismos, y prácticas culturales en contextos urbanos.
También contempla las economías sociales, solidarias, alternativas, populares y comunitarias y no solamente el emprendimiento, las empresas e industrias culturales del modelo hegemónico y tradicional de la economía.
En cuanto a regiones, el Plan Nacional de Cultura propone un enfoque territorial que invita a que las entidades locales prioricen sus acciones pensando en la descentralización y atendiendo a las poblaciones históricamente más excluidas.
El Plan Nacional de Cultura no es únicamente competencia del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes. Su implementación también depende de las entidades del orden territorial, la sociedad civil, en corresponsabilidad del sector cultural privado.
Hoja de ruta
El Plan Nacional de Cultura se ha formulado como un documento abierto, en constante construcción y adaptación a los nuevos retos a los que se enfrenta el sector y la ciudadanía en el día a día. Por eso, para su implementación y seguimiento, se proyectan rutas de trabajo con el objetivo de coordinar las acciones de orden nacional, subsectorial, territorial, intersectorial y poblacional, para avanzar de manera diferenciada en cada uno de los campos y componentes del plan.
En este sentido, uno de los pilares del Plan Nacional de Cultura es el reconocimiento y cuidado de la diversidad de la vida representada en la riqueza cultural y étnica del país. “Es importante anunciar que, por primera vez, el Plan Nacional de Cultura contará con capítulos específicos para los pueblos indígenas, el pueblo Rrom, y las comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras. Avanzamos de manera decidida en la garantía de su derecho fundamental a la consulta previa, libre e informada”, enfatizó el ministro Correa.
El jefe de la cartera de las Culturas precisó que esto se hace con el fin de que sean las mismas comunidades, de manera autónoma, las que construyan la ruta de horizonte para los próximos 15 años en materia de cultura. “Estos capítulos son un compromiso histórico con el reconocimiento y garantía de los derechos culturales de los grupos étnicos y tienen como objetivo orientar acciones en torno a la salvaguarda y fortalecimiento de sus saberes ancestrales, expresiones y prácticas culturales”, dijo.
“De este plan destaco que, en él, se ha plasmado lo diverso que es Colombia y que en su diagnóstico se evidencia la riqueza lingüística que tiene nuestro país, y que mucha gente desconoce. Resalto que en esta política verdaderamente se entiende que Colombia es un país pluriétnico y multicultural”, afirmó Andris Padilla ‘Afroneto’, director de la agrupación de rap folklórico de San Basilio de Palenque, Kombilesa Mí.
Cada uno de los capítulos étnicos tiene la vocación de ser una revisión completa del Plan Nacional de Cultura, sus campos, líneas, temas y estrategias desde la mirada de cada uno de los grupos étnicos, de tal forma que se ajuste a las dinámicas, problemáticas y soluciones planteadas y concertadas con las mismas comunidades.
Consulte en www.mincultura.gov.co el Plan Nacional de Cultura 2024-2038, sus atributos, componentes y campos de trabajo.
Muestra cultural
El evento de lanzamiento contó una muestra cultural y artística que reunió la presentación de una muestra de Cantos de trabajo del Llano —manifestación tradicional reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad desde 2017—, a cargo del cantante y compositor Raúl ‘Numerao’ González. Además, el escenario fue el epicentro de un cypher – batalla de danzas urbanas, a cargo de la fundación El Círculo Hip Hop; así como de la presentación del video jockey (VJ) Rafa Puyana y del grupo de San Basilio de Palenque Kombilesa Mí.
“Para nosotras estar en este lanzamiento representa avanzar con el poder de la mujer en el arte y la cultura de la mano con el Gobierno nacional. Es un reconocimiento al esfuerzo y dedicación de todos estos años en la organización y como bailarinas», dijo Lorena Bohórquez, Bgirl Dylor, representante de El Círculo Hip Hop.
En el cierre de la muestra artística y cultural se proyectó un video que documenta la obra Vitrina (1989), de la artista María Teresa Hincapié (Armenia, 1956-Bogotá, 2008), pionera de la performance en el país.
En el Plan Nacional de Cultura 2024-2038, ‘Cultura para el cuidado de la diversidad de la vida, el territorio y la paz’, las culturas, las artes y los saberes son protagonistas del cambio social.